Claudia, a sus 18 años, se enfrenta a una encrucijada entre la responsabilidad y el deseo de libertad. La enfermedad de su madre sacude su hogar como una tormenta silenciosa, exigiéndole convertirse en el pilar de su familia.
Pero Claudia anhela vivir su juventud sin cargas, disfrutar del presente como cualquier chica de su edad. Entre el deber y sus propios sueños, deberá encontrar un equilibrio, aprender a amar sin perderse a sí misma y decidir hasta dónde llega su sacrificio sin renunciar a su identidad.