Miguel dirige Coartadas, una empresa que fabrica excusas para clientes que necesitan mentir. Un día, tras un encargo, atropella de manera accidental a Noelia, rompiéndole un dedo. En el hospital se conocen, conectan y empiezan a salir.
Noelia es una jueza con un profundo odio por la mentira y el fraude, lo que hace que Miguel oculte su verdadera profesión, asegurando que dirige una funeraria. Todo va bien hasta que Miguel conoce a sus suegros y descubre que el padre de Noelia es uno de sus clientes más fieles.